Junta fuerte y numerosa, que preside Ceferino Cortés y que acoge a un total veinte directivos.
Por delante, muchas ideas que plasmar y un cambio de identidad. En el terreno deportivo, tratar de volver a la Preferente y en el social, conmemorar los cincuenta años de vida del Club, todo ello sin menoscabar la caja de caudales.
El primer acto se fraguó en el verano y se sustentó el trece de agosto en el campo del Plano de Caspe dentro del programa de las fiestas patronales.
Visitaba el terreno caspolino el Barcelona Atlético pero con dos figuras de excepción, los veteranos, Ramallets bajo los palos y César en la punta de ataque.
El resultado final favoreció a los locales por tres a dos, con dos goles de Berges y uno de Ramos para los de casa. Los dos blaugranas fueron de César que procuró el espectáculo soñado.
En la grada un sinfín de aficionados que dejaron más de doscientas mil pesetas en taquilla, dinero que cubrió los desplazamientos de toda la temporada.